Caray, como pasa el tiempo. Tiene más de dos meses que no escribo, pensé que ya no existía este blog, nulo trafico y desinterés del autor. Pero no. Aquí sigue y yo estoy de regreso.
Cuando comencé este blog había muchos blogs dedicados a las elecciones, en los que se notaba claramente las manotas de los partidos políticos queriendo parecer opinión pública apoyando a sus candidatos, no aceptaban ningún contacto externo, tal vez para no demostrar su escasa capacidad de razonamiento en caso de tener que responder a críticas.
Hoy al estar buscando blogs, encontré varios bloggeros dedicados a tratar de fecalismo. ¿Qué carambas es eso de fecal?. Al leerlos me dí cuenta que tratan del ilegitimo presidente de México, me parece muy acertado que al tratar de materia presidencial, lo traten como un asunto fecal.
A la gente de mi generación se nos han puesto muchas etiquetas. Pero desde que yo me acuerdo el gobierno nos ha tratado como materia prima para exprimir, pretendiendo que los ciudadanos somos tan tontos que no nos damos cuenta de sus torpes maniobras. Como con Echeverria que recibió un país con economía estable y lo dejó endeudado, el peso devaluado y estrenó en México el fenómeno de la inflación además del iva. Y el público aprendió a entender lo contrario de lo que decía. Ya son casi cuarenta años de Tlaltelolco sin embargo el gobierno está regresando a la era de Diaz Ordaz. Fox quiere que se le recuerde como lacayo de Bush, traidor a la democracia (que a él le abrió la puerta) y ahora como fascista represor (recuerdas a los mineros), el tan campechano para hablar imitó muy bien a la gente sencilla y veraz del pueblo, pero fue pura actuación. Ya sabemos que a nuestros gobernantes no los distingue su inteligencia ni su cultura, la palabra democracia que no la sueltan ni para dormir ¿saben lo que significa? Si el pueblo de Oaxaca no quiere a su gobernador ¿por que se empeña el gobierno federal en protegerlo aún a costa de la vida de los ciudadanos?